CASAMIENTO PAGANO
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Written by H. J. Carol Thompson
Stormsdottir, AKA Stormy
(traducción Carmen Orellana)
En una época la “unión de manos” (handfasting, en inglés) fue la única forma de estar comprometidos, debido a que la iglesia le dio al gobierno civil de ese periodo, la responsabilidad de estos asuntos. En las Islas Británicas, se utilizó antiguamente como la forma pagana de casarse y siguió siendo legal en Escocia hasta 1939, casi después de que el Acta de Lord Harwicke en 1753 declarara que los matrimonios en Inglaterra sólo se considerarían legales si se llevaban a cabo por un clérigo. Después de este Acta, la fronteriza ciudad de Gretna Green llegó a ser la meca para las parejas inglesas que iban hasta allí para casarse.
En aquellos tiempos, la pareja misma celebraba la unión de manos ante los testigos; en Escocia se acostumbraba comprometerse por un periodo de un año y un día, antes de que la boda fuera aprobada.
La palabra “Handfasting” (unión de manos) tiene su origen en la costumbre de amarrar las manos de los novios juntas. En algunas versiones, sólo se hace mientras dura la ceremonia, pero en otros casos, sólo se desamarra hasta que la boda está físicamente consumada.
La palabra también toma su origen de la costumbre de estrechar las manos sobre un contrato. En muchas tradiciones paganas se utiliza actualmente como una forma no-legal de casarse, para algunos significa estar unidos por un año y un día y después renovar sus votos hasta que el amor dure, mientras que para otros, es un compromiso para estar juntos en muchas vidas.
Es difícil encontrar un ritual único para esta ceremonia ya que la mayoría lo adapta a sus propios gustos, sin embargo estos son algunos de los elementos básicos.
Las manos generalmente se unen como parte del ritual. Otra de las costumbres es que mientras se ven a los ojos uno al otro, la pareja toma juntas sus manos derechas y las izquierdas formando el símbolo del infinito (como un 8 recostado) mientras que la cuerda se ata alrededor de sus manos en un nudo (knot).
El ritual por lo general se lleva a cabo por un Jefe, Líder, Sacerdote, Sacerdotisa, Shaman o Anciano de la comunidad mientras que la pareja recita sus votos de compromiso para ser comprometida por un año y un día en frente de los testigos.
Durante el último día de ese periodo prometido (1 año y 1 día) podrán repetir la promesa indeterminadamente las veces que quieran por este periodo.
Antiguamente no se llevaba un registro de las personas que se comprometían, casaban, tenían hijos o morían. Hoy, los sacramentos de la iglesia tienen la responsabilidad de tomar nota de estos asuntos. Anteriormente, estas cosas eran vigiladas por la comunidad y por ello se establecía en la ley lo que pasaba entre la pareja que hacía su compromiso.
Si una unión de manos se llevaba a cabo con las dos manos izquierdas juntas sin amarrarse con el nudo, como era la costumbre de la nobleza alemana, significaba que la mujer era “la amante” y no sería posible reclamar el nombre, la herencia, la propiedad, etcétera de la esposa real y estaba sólo bajo protección del hombre. Pero su descendencia sería cuidada como sus herederos legales segundos en línea de la primera esposa legal del hombre.
Tener mucha descendencia, entonces, era la única forma de tener un “Seguro Social” en la vejez. Las combinaciones anteriores se consideraban legales.
El gesto de unir las manos parece derivar de una de las imágenes indoeuropeas de la conjunción del hombre y la mujer, el signo del Infinito, el cual enlaza dos círculos que representan el Sol (mujer) y la Luna (masculino) o en algunas tradiciones del sur del Mediterráneo era el Sol (masculino) y la Luna (femenina).
La unión de manos aún constituye un matrimonio totalmente legal en Europa, así se haya bendecido por la iglesia o no. Los sacerdotes, por suspuesto, recomiendan que se vaya a la iglesia tan pronto como sea posible antes de firmar el contrato y hacer la unión de manos. El Matrimonio es ahora uno de los Siete Sacramentos que fueron ignorados por la iglesia durante siglos. Sólo los ricos e influyentes podían darse el lujo de un matrimonio religioso.
La unión de manos permanecía bajo la jurisdicción de la ley común, más que de la canónica. En Suiza, durante el siglo XVI, si las parejas eran vistas en público bebiendo juntas se las podía considerar un matrimonio.
EL PROCEDIMIENTO
Planear una unión de manos es igual que planear una boda normal, hay que pensar en muchísimas cosas y otros no menos importantes detalles.
A continuación hay una lista de las cosas que puedes ir pensando, pero en general te servirá una buena revista para bodas, siempre y cuando modifiques algunos detalles.
CUANDO:
Puedes elegir un día significativo para ustedes, como el día en que se conocieron, el día en que se comprometieron, alguna fecha familiar en especial (cuando se casó tu mamá, tu abuela) o puede coincidir con algún sabbat del año. En este caso, el mejor sería Beltane.
DONDE:
La mayoría de veces se realiza en la ciudad donde vives, pero puede que haya mejores opciones en lugares cercanos y que estos les den la oportunidad de convivir con la naturaleza, que es lo ideal en una unión. Son hermosas las bodas en exteriores, en un bosque, una huerta, la playa y hasta dentro de la orilla del mar, mientras todos se bañan con la pureza del agua.
Tampoco debes olvidar las condiciones del clima, ya que hay épocas del año que suele llover más que otras o lugares en los que sólo lo hace de noche, en fin, procura tener siempre a la mano unas lonas o templetes donde poder resguardarse.
Quizás sirva la casa de campo de alguna amistad o pedirles a todos que viajen hasta algún lugar en especial que tenga un buen significado para ustedes. También puede ser en algún parque de diversiones o en una alberca, en fin, usen su imaginación y encontrarán un lugar muy original y emotivo.
QUIEN:
Deberán pensar qué tan grande hacer su lista de invitados relacionando esto con el lugar donde piensan hacer la ceremonia y el dinero de que disponen, es preferible invitar pocas y seleccionadas personas y atenderlas con esmero, que invitar a muchas y descuidarlas. De esta forma será más cálida la boda y sentirán de forma más personal el afecto de todos hacia ustedes. No se olviden de anunciar en las invitaciones el estilo de la boda: formal, informal, en traje de baño, etcétera.
Recuerden siempre dar invitaciones personales para que no haya invitados sorpresa que puedan arruinarlo todo.
Una de las cosas más importantes es pensar en quién va a celebrar tu unión: puede ser algún sacerdote o sacerdotisa pagano que conozcas, o si no el jefe indígena de alguna comunidad, tu maestro o guía espiritual, algún miembro especial de tu familia o algún amigo. Recuerda que él siempre estará presente en los recuerdos de aquel día y debe ser por lo tanto una persona importante y valiosa para ustedes.
Se debe pensar en los padrinos, las personas que atarán sus manos, o que les darán ofrendas en símbolo de abundancia, etc. Ellos también tienen que ser muy especiales, no se lo pidas a alguien por compromiso, recuerda que ellos también estarán en tus memorias y serán el símbolo de lo que les ofrezcan.
Los que nunca pueden faltar son los músicos o un conjunto que ponga discos, esta música debe estar previamente seleccionada y variará dependiendo de los gustos y costumbres de cada persona, pero se vería hermoso que durante la ceremonia se tocaran temas típicos irlandeses en flauta muy bajitos, como música de fondo.
RITUALES:
Hay algunos detalles que se deberán dejar en claro, tanto para los invitados, como para el oficiante de la boda y uno de ellos es el ritual que se llevabará a cabo. Pueden ser muchos como la unión de manos con un nudo, saltar sobre una escoba para la fertilidad, el color o colores necesarios para ese día (tanto para los adronos y la decoración, como para la ropa de los invitados), los instrumentos que se llevarán hasta el altar, el tipo de ropa que se usará, las flores que pondrán y la forma en que diseñarán todo el escenario de la boda.
Habrá que decidir también la hora más propicia para hacer el ritual, consagrar antes el lugar, elegir el lugar donde se hará el círculo y elegir si se hará sólo la ceremonia o se dará un banquete, una merienda o solamente un coctel.
Las ofrendas no pueden faltar en una boda, tanto las ofrendas de la propia pareja entre ellos, como las de los invitados a la pareja, y viceversa.
Recordemos que es una reunión en la que todos conviven y festejan por partes iguales, las ofrendas van desde los anillos de los novios, hasta canastas con fruta, telas, sábanas, etc.
VOTOS:
Los votos son las promesas y pensamientos que el novio y la novia se dirán en la ceremonia, piensen en algunas palabras que recuerden de su pareja, algo que haya hecho por ti que tu aprecies, un fragmento de algún poema o de alguna canción, etcétera, deberán ser muy bien escogidos ya que representan parte de lo que tu pareja y la unión significan para ti.
POR QUE:
Sin embargo una de las preguntas más importantes que deben hacerse es ¿por qué hacer la unión de manos?, qué significa para ustedes tanto la ceremonia como su simbolismo? es eso realmente lo que quieren? En qué forma creen que cambiarán sus vidas? Qué esperan conseguir con este paso? Planean que sus hijos sigan este Camino? Realmente creen que puedan ser compatibles sus vidas y su forma de ser? Cuántos hijos planean tener? Etcétera.
Lo principal en una relación es que los dos estén dispuestos a aprender y colaborar por hacer que la relación funcione y se mantenga sana y feliz, esto incluye cambiar algunos hábitos que tenemos cuando somos solteros o modificarlos por algunos nuevos, pero también incluye momentos de felicidad y de esperanza compartida que los solteros no pueden tener. Nunca pienses que modificar tus rutinas es empezar mal, siempre hay que ir evolucionando y cambiando, el movimiento es el eje de la vida, sin él permaneceríamos muy aburridos, así que disfruta cada momento y cada etapa de tu soltería y tu unión, para que en tu vejez tengas memorias dignas de ser contadas a los demás.